Nos hacemos cargo del proyecto de tu casa pasiva en Valencia, e incluso bajo la certificación Passivhaus en toda la Comunidad Valenciana. Cierta relevancia ha cogido nuestro último proyecto passivhaus elaborado mediante entramado ligero de madera en el municipio de Aigües, Alicante, publicado en algunos portales web de importancia nacional. Con respecto a este estándar y el sistema comentado se puede relacionar perfectamente con nuestro anterior post.
Así como edificaciones de otros usos distintos, como oficinas y de uso terciario. El presente y futuro de la construcción pasa por realizar construcciones de bajo impacto ambiental y bajo consumo energético. Desde PAS arquitectura hace años que trabajamos con este tipo de proyectos, y esto es algo que nos enorgullece.
Este estándar de origen alemán demuestra lo prescindible que resulta el consumo de energía de forma desmesurada en sistemas de climatización en las edificaciones. A través de un uso consciente de los materiales, un estudio bioclimático de las viviendas y los 5 principios que vamos a enumerar posteriormente se pueden conseguir viviendas que ahorran hasta un 75% con respecto a las viviendas convencionales.
La poca energía que requieren estas viviendas se pueden cubrir con facilidad a partir de energías renovables, convirtiéndose en una construcción con un coste energético muy bajo para el propietario y el planeta.
A partir de un estudio detallado de las diferentes opciones y condicionantes externos como la orientación, compacidad, protecciones solares, etc. podemos lograr un correcto funcionamiento de la vivienda en cuanto a salud y confort.
En un clima como el de la provincia de Valencia, será muy importante un diseño que nos permita protegernos de la potente ganancia solar con la que contamos en el Mediterráneo en la etapa de verano e intentar maximizar su aprovechamiento en la etapa invernal, optimizando así la orientación, diseño y morfología de la propia vivienda.
Esto lo podemos conseguir a través de diferentes estrategias bioclimáticas, como puede ser el uso de pérgolas, porches cubiertos, voladizos, sombras de árboles de hoja caduca y otros elementos que puedan surgir a través del emplazamiento de la vivienda o edificación.
Fuente: ecohabitar.org
Se utilizan mayores espesores de aislamiento térmico que los indicados por la normativa vigente, para proteger de esta forma la vivienda de la temperatura exterior, reduciendo la demanda de energía.
En el caso práctico de una casa pasiva en Valencia, nos movemos en un sistema de aislamiento por el exterior (SATE) de entre 6 y 10 centímetros de espesor, dependiendo del tipo de sistema constructivo y su cerramiento. Unos 6 centímetros para el caso de un cerramiento tipo mediante sistema de entramado ligero de madera y de 10 centímetros de espesor en un cerramiento de fábrica convencional, pudiéndose tratar con sistemas de una sola hoja de hormigón celular, como es el caso de la vivienda de nuestro compañero Alejandro Olmo, de OG estudio de arquitectura, de la cual adjuntamos link.
Mediante un diseño exhaustivo se garantiza la inexistencia o minorización de puentes térmicos en la edificación (pérdidas de continuidad de la capa de aislante térmico perimetral de la envolvente).
Mediante ensayo normalizado frente a filtraciones de aire no deseadas entre el interior y el exterior (Blowerdoor) se garantiza una correcta hermeticidad dentro de unos valores establecidos por el estándar, 10 veces más exigente que los valores exigidos por el Código Técnico.
Es el pulmón de un edificio pasivo. Este sistema permite ventilar de manera continua el interior de los edificios sin perder la energía (temperatura) que estos tienen.
Arquitecto colegiado n. 14848 en el Colegio Oficial de Arquitectos de la Comunidad Valenciana.